Tecnología de iones de litio LFP: baterías de alto rendimiento

En Manitou, nuestra misión es clara: estamos comprometidos a apoyar a los profesionales de la manipulación de materiales con soluciones robustas, seguras, innovadoras y eficientes. Al integrar la tecnología de iones de litio, y más concretamente la química LFP (ferrofosfato de litio), en nuestras carretillas elevadoras, le ofrecemos una respuesta moderna y pragmática a los retos de intensidad, rentabilidad y flexibilidad de sus operaciones logísticas. ¿Cuáles son los puntos fuertes de las baterías de iones de litio y por qué optar por la tecnología LFP? Confíe en la experiencia y la calidad de Manitou para que sus tareas de manipulación sean más fiables y le ayuden a optimizar su negocio.

Disponibilidad continua para un rendimiento sin concesiones

La primera ventaja de la batería de iones de litio es su capacidad para adaptarse a su ritmo. Gracias a su capacidad de recarga rápida y parcial, sus carretillas pueden permanecer en funcionamiento continuo, sin necesidad de sustituir la batería durante un turno. Una pausa de 30 minutos es suficiente para recuperar el 50% de la capacidad de la batería (dependiendo de la configuración de la máquina/cargador), y una hora es suficiente para reanudar el trabajo durante tres horas. Esta flexibilidad es un motor directo de la productividad, sobre todo en entornos de alta rotación o cuando se trabaja por turnos. Reducirá el tiempo dedicado a interrupciones y manipulaciones pesadas, así como los riesgos asociados a los cambios de batería. Como resultado, sus equipos ahorrarán tiempo, reducirán su exposición a la fatiga y se concentrarán en lo importante: la ejecución sin problemas de los flujos de manipulación.

EP LFP lithium
Una inversión que se amortiza rápidamente
La tecnología de iones de litio puede suponer una mayor inversión inicial que las baterías convencionales de plomo-ácido, pero se amortiza rápidamente. Y eso es porque no requiere mantenimiento: no hay necesidad de rellenar con agua destilada, no hay necesidad de comprobar la acidez, y no hay necesidad de establecer una sala de carga dedicada por debajo de 600 kW. Los costes de mantenimiento se reducen drásticamente, al igual que las pérdidas de explotación por averías o ciclos de recarga demasiado largos. La vida útil de una batería de iones de litio puede ser de 10 años o más, con hasta 12.000 ciclos de carga completa en función del uso y el entorno. Esto ahorra costes durante todo el ciclo de vida de la carretilla. A esto hay que añadir un rendimiento energético constante, con una potencia que se mantiene alta incluso al final del ciclo, lo que le proporciona una máquina fiable y duradera, perfectamente dimensionada para un uso intensivo.
ME LIFT LFP lithium
Tecnología limpia y segura
La química LFP que hemos elegido se basa en materiales seguros y no tóxicos: litio, hierro y fosfato. La tecnología LFP no está sujeta al desbordamiento térmico, lo que la convierte en la tecnología más segura. Nuestras baterías se someten a pruebas rigurosas -penetración, sobrecarga, estrés- y se diseñan para funcionar con seguridad, incluso en los entornos más sensibles. Esta estabilidad térmica hace que nuestras carretillas sean perfectamente compatibles con cámaras frigoríficas o lugares sometidos a temperaturas extremas. Y como no emiten gases durante la carga, puede utilizarlas en espacios cerrados sin necesidad de ventilación especial. Como no hay metales raros en la química de las LFP (como el cobalto, por ejemplo), su impacto medioambiental está entre los mejores de las tecnologías de iones de litio.
ES 112 LFP lithium
Ergonomía diseñada pensando en los usuarios
Como las baterías de iones de litio tienen una alta densidad energética, pueden transportar la misma cantidad de energía ocupando menos espacio, lo que las hace más compactas y libera espacio en la cabina. El cargador de a bordo puede recargarse en cualquier momento, mediante una simple toma de corriente. toma de corriente. Usted reduce su dependencia de la infraestructura, garantizando al mismo tiempo una autonomía óptima a sus equipos. Por último, nuestros sistemas integrados de gestión de la batería (BMS) controlan en tiempo real el estado de carga, la temperatura y el uso global de la batería. Esta inteligencia a bordo es una garantía adicional de rendimiento y longevidad.

Una gama específica para todas sus necesidades

Nuestras carretillas ME LIFT están totalmente equipadas con baterías LFP de iones de litio, la tecnología más segura disponible, que garantiza una alta productividad y un mantenimiento mínimo.
Para operaciones de almacenamiento, también ofrecemos los modelos EP 15 Easy y ES 112 Easy, que combinan maniobrabilidad, potencia y resistencia.
¿Desea obtener más información? Nuestros distribuidores estarán encantados de mostrarle los modelos que mejor se adaptan a sus necesidades y ayudarle a integrar esta tecnología en sus operaciones.

Descubra la gama ME LIFT